Detener naturalmente el olor a sudor
Hoy he decidido hablar de un tema muy veraniego pero un tanto embarazoso: el sudor. ¡Llévalo conmigo! ¿Sabías que el sudor en sí es prácticamente inodoro hasta que las bacterias lo fermentan? Las bacterias prosperan en ambientes cálidos, húmedos y ácidos y la axila o axila humana es una de las áreas más cálidas de la superficie del cuerpo humano. Las glándulas sudoríparas proporcionan la humedad que nos refresca cuando hace calor. Sin embargo, cuando nos lavamos las axilas, los jabones se lavan con jabones de pH alcalino, la piel pierde su acidez (pH 4,5 – 6) y el pH se vuelve alcalino, es decir, el pH en el que...

Detener naturalmente el olor a sudor
Hoy he decidido hablar de un tema muy veraniego pero un tanto embarazoso: el sudor. ¡Llévalo conmigo! ¿Sabías que el sudor en sí es prácticamente inodoro hasta que las bacterias lo fermentan? Las bacterias prosperan en ambientes cálidos, húmedos y ácidos y la axila o axila humana es una de las áreas más cálidas de la superficie del cuerpo humano. Las glándulas sudoríparas proporcionan la humedad que nos refresca cuando hace calor. Sin embargo, cuando nos lavamos las axilas, los jabones se lavan con jabones de pH alcalino, la piel pierde su acidez (pH 4,5 – 6) y el pH se vuelve alcalino, es decir, el pH en el que prosperan las bacterias. Esto hace que las axilas sean el entorno perfecto para que las bacterias colonicen, es decir, las axilas. Las bacterias se alimentan del sudor de las glándulas apocrinas (y de las células muertas de la piel y del cabello, mmm) y liberan ácido 3-metil-2-hexenoico en sus desechos, lo que provoca el olor corporal.
Normalmente, el vello de las axilas mantiene la humedad alejada de la piel y ayuda a mantener la piel lo suficientemente seca como para prevenir o reducir la colonización bacteriana (el cabello es menos susceptible al crecimiento bacteriano y, por lo tanto, es ideal para prevenir el olor bacteriano), pero a la mayoría de las mujeres les gusta mantener esta área libre de vello. ¿Qué hacer con todo este asunto de las bacterias? Bueno, el desodorante o el antitranspirante sería la solución natural, pero para quienes recurrimos a lo natural, aquí te dejamos algunos consejos.
Comer jugo de remolacha y rábano rojo a diario puede reducir el olor corporal, y las hierbas y plantas se han utilizado durante mucho tiempo como desodorantes internos. Los fitonutrientes de las plantas aromáticas como el perejil, el apio, el tomillo, el orégano, la salvia y el romero ayudan a limpiar tus órganos internos de toxinas y su consumo asegura un olor a limpio. Una cucharada de anís en tu dieta diaria te aporta la misma función depurativa. Prueba a hacer una infusión fuerte de apio o salvia para utilizarla como desodorante. Aplica la infusión de apio o salvia en tus axilas o agrégala al agua de tu baño. El vinagre de sidra de manzana puede ser un buen desodorante natural: añade el vinagre de sidra de manzana a un poco de agua y colócalo en tu axila, no te preocupes, el olor a vinagre desaparecerá en unos minutos. Y olerás dulce como un bebé.