El estado actual del acuerdo de París

El estado actual del acuerdo de París
El Acuerdo de París, un contrato innovador para la protección del clima, se acordó en la Conferencia global del Clima (Cop21) en París, Francia, a fines de 2015. La importancia de este Acuerdo radica en su consenso global sin precedentes sobre la necesidad de limitar el calentamiento global a fines del siglo a menos de 2 títulos de Celsius, preferiblemente a 1.5 grados Celsius. Casi todos los estados del mundo, 196 en número, han firmado el acuerdo y la mayoría lo han ratificado, lo que significa que han obligado legalmente a limitar el calentamiento global. Este artículo examinará y evaluará el estado actual de este importante contrato.
La funcionalidad del acuerdo de París
Antes de explicar el estado actual de este Acuerdo, es importante comprender la mecánica de este contrato global.
Objetivos y obligaciones de los estados signatorios
El objetivo principal del acuerdo es limitar el calentamiento global al reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Para este propósito, cada país firmante que ratificó el acuerdo ha propuesto una contribución determinada a nivel nacional (NDC). Este artículo determina cómo el estado planea reducir sus emisiones y adaptarse a los efectos del cambio climático.
Mecanismo de verificación
Para garantizar que los estados federales cumplan con sus obligaciones, el acuerdo de París proporcionó un mecanismo de revisión en el que el progreso se verifica cada cinco años y, si es necesario, establece nuevas metas. Este procedimiento de revisión se llama "inventario global" y está destinado a garantizar un aumento regular en las ambiciones.
El estado actual del Acuerdo de París
Más de cinco años después de que se haya firmado el acuerdo de París, la mayoría de los países han tomado los primeros pasos para implementar sus contribuciones nacionales. Sin embargo, el alcance y la velocidad de estas medidas aún no son suficientes para lograr el objetivo principal del acuerdo.
Progreso en la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero
La implementación del Acuerdo de París, sin duda, ha llevado al progreso a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Según el Informe GAP de emisiones del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, las emisiones de CO2 global se han mantenido casi estables desde 2016.
A pesar de este progreso, sin embargo, el informe advierte que las medidas actuales de los estados federales no son suficientes para reducir la emisión para lograr el objetivo de 2 grados, y mucho menos el objetivo de 1.5 grados.
Implementación de contribuciones nacionales
La mayoría de los países presentaron sus primeras contribuciones nacionales y presentaron planes para reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero. Muchos han comenzado a implementar sus planes, p. B. Mediante la construcción de más energías renovables, la mejora de la eficiencia energética y la implementación de medidas para la forestación.
Sin embargo, existe una brecha entre los ambiciosos objetivos establecidos en el Acuerdo de París y las medidas reales de los estados federales. El progreso en la implementación de contribuciones nacionales aún es inadecuado.
Desafíos y obstáculos
A pesar de los esfuerzos de la comunidad internacional para lograr los objetivos del Acuerdo de París, hay una serie de desafíos.
Falta de ambiciones
Según los expertos, las contribuciones nacionales de los estados federales no son suficientes para alcanzar el objetivo de 2 grados. La política de energía, industrial y de transporte de muchos países aún no está suficientemente orientada a la protección climática.
Financiamiento
Financiar la protección climática y la adaptación al cambio climático es otro gran desafío. El Acuerdo de París establece que los países industrializados proporcionan a los países en desarrollo a partir de 2020 anualmente $ 100 mil millones en ayudas financieras. Sin embargo, si este objetivo se logra es controvertido.
conclusión
El Acuerdo de París ha sufrido un paso importante hacia la protección del clima global. Ha logrado hacer que casi todos los estados del mundo estén de acuerdo sobre un objetivo común y lidiar con las obligaciones de reducir sus emisiones. Sin embargo, el progreso anterior es inadecuado. Los países deben acelerar sus esfuerzos y aumentar sus ambiciones para lograr los objetivos acordados. En este sentido, el Acuerdo de París sigue siendo una tarea y desafío continuos para la comunidad internacional.