Alternativa a la vaginosis bacteriana: ¿es sólo un mito?
Abundan las opciones alternativas para la vaginosis bacteriana, pero no todas parecen funcionar. Escuchamos muchos consejos de nuestras amigas, de familiares, etc., como lo de las “bragas de algodón”, etc. Pero queremos una cura, simple y llanamente. Cuando recurrimos a medicamentos de venta libre, descubrimos que parecen funcionar durante un tiempo, pero pueden regresar inmediatamente después de nuestro ciclo mensual o, a veces, justo después de tener relaciones sexuales. Esto es francamente frustrante para muchos de nosotros. Entonces, ¿hacia dónde vamos a partir de ahí? Sin embargo, nuestro ginecólogo invariablemente le recetaría más...

Alternativa a la vaginosis bacteriana: ¿es sólo un mito?
Abundan las opciones alternativas para la vaginosis bacteriana, pero no todas parecen funcionar. Escuchamos muchos consejos de nuestras amigas, de familiares, etc., como lo de las “bragas de algodón”, etc. Pero queremos una cura, simple y llanamente. Cuando recurrimos a medicamentos de venta libre, descubrimos que parecen funcionar durante un tiempo, pero pueden regresar inmediatamente después de nuestro ciclo mensual o, a veces, justo después de tener relaciones sexuales. Esto es francamente frustrante para muchos de nosotros. Entonces, ¿hacia dónde vamos a partir de ahí? Nuestro ginecólogo invariablemente le recetaba más cantidad, pero en dosis más fuertes, y luego pasaba a los antibióticos. En lo que respecta a una alternativa a la vaginosis bacteriana, los antibióticos pueden ser la peor. ¿Porqué es eso? Déjame explicarte...
Primero, permítanme señalar la naturaleza de los antibióticos: la palabra "antibiótico" significa "contra la vida"... es decir, toda la vida. Estos matan las bacterias amenazantes involucradas, pero también destruyen cualquier bacteria beneficiosa con la que nacimos. Esto es parte de nuestras defensas naturales, ya que ayuda a combatir gérmenes, virus y otras bacterias invasoras. Esta es la razón por la que a menudo se repite con fuerza, ya que todos nuestros mecanismos de defensa contra él han sido diezmados. ¿Qué hace nuestro médico a continuación? Por supuesto, prescriba aún más antibióticos, ¡mucho más fuertes, por supuesto! ¿Alguien por ahí ve la locura de todo esto además de mí?
Afortunadamente, existe una alternativa natural a la vaginosis bacteriana: la naturopatía. Los tratamientos a base de hierbas y otros remedios naturales son económicos, fáciles de preparar y están ampliamente disponibles. Incluso puedes tener todo lo que necesitas en tu propia casa. Búsquelos porque no solo atacan los síntomas sino que se centran en la causa. Lo que necesitamos es una cura, no sólo un rápido desplazamiento de las experiencias sintomáticas. Como alternativa a la vaginosis bacteriana, la medicina natural tampoco tiene efectos secundarios. ¿No exige eso una mayor investigación?